En la
Antigua Grecia, el término
meteco significaba simplemente un extranjero, un no griego, que vivía en una de las ciudades-estado griegas. La palabra no tenía el significado peyorativo que tiene hoy día. Como elementos comunes encontramos a los extranjeros que vivían en ellas (
polis), pero no eran considerados
ciudadanos al igual que las
mujeres,
esclavos y los libertos (esclavos liberados).