El
griego medieval (Μεσαιωνική Ελληνική) es un término lingüístico que describe el tercer período en la evolución histórica del
idioma griego. Su desarrollo se sitúa convencionalmente entre los años
330 (fundación de
Constantinopla) y
1453 (caída de la ciudad en poder del
Imperio otomano), aunque lingüísticamente las transformaciones más importantes se produjeron a partir del
siglo VIII. Puesto que coincidió con la historia del
Imperio bizantino, recibe a menudo el nombre de
griego bizantino.