Los
derivados de crédito son contratos financieros bilaterales (Over The Counter –
OTC) por los cuales una de las partes busca cubrirse del
riesgo de crédito de un determinado instrumento y transferirlo a la contrapartida a cambio de una prima periódica. Se trata de derivados cuyos subyacentes son obligaciones de pago de emisores públicos o privados.