Vestal (del
latín,
Vestalis y plural,
Vestales) en la
Religión de la Antigua Roma, era una
sacerdotisa consagrada a la diosa del hogar
Vesta. Originalmente, es probable que fueran dos, cuatro en tiempos de
Plutarco y posteriormente, seis. De su importancia dan prueba que el
Colegio de las Vestales y su bienestar eran considerados fundamentales para la continuidad y seguridad de
Roma. Eran sacerdotisas públicas
Vesta publica populi Romani Quiritium y, en tanto que tales, constituían una excepción en el mundo sacerdotal romano, que estaba casi por entero compuesto de hombres.