La expresión en inglés
There is no alternative –
TINA– (en español : «
No hay alternativa o
No hay elección ») es un
eslogan político corrientemente atribuido a
Margaret Thatcher cuando ella era
Primer Ministro del Reino Unido. Este eslogan puede interpretarse como que el
mercado, el
capitalismo, y la
mundialización, son fenómenos necesarios y beneficiosos, y que cualquier otra orientación está destinada al fracaso. En realidad, justo es señalar que Margaret Thatcher verdaderamente utilizó muy poco esta expresión durante su carrera política, al menos en sus numerosas intervenciones oficiales y parlamentarias. No obstante ello, a nivel popular y mediático, la expresión (particularmente bajo el
acrónimo « TINA ») siguió siendo utilizada como sinónimo del tipo de orientación política impulsada por la entonces llamada «
Dama de Hierro ».