En los tetrápodos primitivos, como Trematops, el tarso se compone de tres filas de
huesos. Hay tres tarsianos proximales, el tibial, intermedio, y fibilar, llamado así por sus puntos de articulación con los huesos de la extremidad inferior. Estos son seguidos por una segunda fila de cuatro huesos, referido como el Centralia (singular: central), y luego una fila de cinco tarsianos distales, cada uno con una articulación metatarso clave.