La
guerra de Kitos (
115 -
117) (en
hebreo: מרד הגלויות
mered ha'galoyot, «Rebelión del exilio») es el nombre dado a la segunda de las
guerras judeo-romanas. El nombre proviene del general romano
Lucio Quieto, quien reprimió despiadadamente la rebelión
judía en
Mesopotamia y fue luego enviado a
Judea como procurador por el emperador
Trajano, cargo que mantuvo hasta que fue ejecutado por orden de
Adriano.