Las
escorias son un
subproducto de la
fundición de la
mena para purificar los
metales. Se pueden considerar como una mezcla de
óxidos metálicos; sin embargo, pueden contener
sulfuros de metal y
átomos de metal en forma de elemento. Aunque la escoria suele utilizarse como un mecanismo de eliminación de residuos en la fundición del metal, también pueden servir para otros propósitos, como ayudar en el control de la temperatura durante la fundición y minimizar la reoxidación del metal líquido final antes de pasar al molde.