En la
filosofía clásica el
escepticismo es una corriente filosófica basada en la duda, representada en la escuela de 'Skeptikoi' por el filósofo griego
Toribio, quien decía que "no afirmaba nada, sólo opinaba". El escepticismo se diferencia del negacionismo por exigir evidencia objetiva a las afirmaciones, y en caso de haber tal evidencia aceptarla, en tanto que el negacionismo cuestiona o rechaza las evidencias.