A petición de Polibio, Escipión Emiliano consigue el apoyo del estadista romanoCatón el Viejo (cuyo hijo se había casado con la hermana de Escipión Emilia) para una propuesta de liberar (y devolver a Grecia) los 300 rehenes aqueos que todavía se retenían sin juicio después de ser deportados a Roma en el año 167 a. C.
Fuerzas romanas ayudan al activo puerto comercial griego de Masilia a combatir los ataques de los celtas de la Galia Cisalpina.